La inspección visual es utilizada para determinar la condición de activos de todos los tipos. En términos generales podemos definir dos tipos generales de aplicaciones: la toma de lectura de parámetros y la evaluación de la condición a partir de pautas de inspección.
Lectura de parámetros:
La lectura de parámetros la utilizamos para la colección de datos de campo. Es decir, parámetros de proceso que puedan indicar las condiciones de operación de un activo, por ejemplo: presión, temperatura, corriente, caudal, etcétera.
Pautas de inspección:
Es la detección de anomalías del activo a través de detección de fallos tales como:
- Cantidad: número de elementos presentes o faltantes, por ejemplo, pernos en una carcasa.
- Tamaño: reducción, aumento o confirmación de dimensiones.
- Forma o configuración: forma o deformación de cuerpos o elementos.
- Acabado superficial: liso, rugoso, pulido, rectificado, pérdida de pintura, suciedad, corrosión o deformación.
- Características de color: por ejemplo, el color del aceite conforme va envejeciendo.
- Presencia de discontinuidades superficiales: fracturas, ralladuras, grietas, etc.
- Ruido anormal: rozaduras, escape de gas o líquidos, alta vibración, etc.